Recordando aquella serie famosa llamada Corrupción en Miami, muchas veces he escuchado estos últimos meses que estos son unos años negros para la corrupción, y quizás lo sean, aunque yo estoy muy contento porque están saliendo a la luz cientos de personas que han jugado todo este tiempo con nuestro dinero, el dinero público de los impuestos, sin ningún otro cometido que enriquecerse. Qué no habrá pasado en los años 80, 90 y primeros dosmiles, años estos últimos de gloria económica y de mil veces calificada como democracia consolidada. Nos creemos que esto pasa solo ahora, y estoy seguro de que no. El cambio generacional y el sistema educativo español está dando sus frutos, gente joven que no se deja llevar por las estructuras del pasado.
En la época de las series de televisión por internet, hacía tiempo que no veía tantas series, y nunca tantas juntas, quizás desde que solo había dos canales de televisión, parece que estemos asistiendo a una serie llamada Corrupción en España con diferentes temporadas: la Gürtel, la de los Eres, la de la Púnica, y ahora la temporada de la Operación Lezo; con decenas de cameos de otros muchos que se entrelazan entre unas y otras.
Muchas de estas historias me recuerdan a los Soprano o a House of Cards, imprescindibles.
Recordáis las series americanas de los 80: Dinastía, Dallas, Los Colby, Falcon Crest, o Santa Bárbara, y que Los Colby eran protagonistas a su vez de Dinastía. Pues esto es algo parecido.
Y mientras, aquí estoy, un domingo de puente escuchando canciones de Janis Joplin, ya sin ti. Aquí he vuelto, a cambiar las rutinas, adaptarme a las nuevas, a las tardes frente al pc descubriendo lo que nos ofrece el mundo.