El resultado de abrir un bote pequeño puede llevarte a sufrir o disfrutar de las consecuencias de su esencia, plenamente. Pero si aquí aplicamos la Teoría Queer, aun pareciendo incauto, existen múltiples posiciones intermedias desde un lado al otro.
Durante algunas horas se sucedieron instantes de pequeños momentos. La esencia se convierte en el alma del acercamiento, y las pequeñas disputas, de algún guiño, y todas las lisonjas, de vergüenzas y desvergüenzas. Durmiendo observas pasible y descubres más pequeños detalles, vacíos o cubiertos por una ligera capa de sombras pasajeras.
Quizás en el verde, más allá del mismo color, esté la verdad, la verdad de lo infinito o lo pasajero.
Y mientras, miro y me dejo llevar...
1 comentario:
Me encaaaaaaanta Vetusta Morla; Lauri y yo les vimos en Fuenla y estos chicos saben llegar, vaya que sí!!!
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