Hoy finalizamos la década de los dosmiles, y aunque haya diversas opiniones sobre cuándo comienza o acaba una década, sí que parece que el Siglo XXI comenzó en 2001 y no en el año 2000. Así que vamos a hacer balance de la década.
Rodeada de las anteriormente llamadas Nuevas Tecnologías, que ya no son tan nuevas, se ha generalizado el uso del móvil y de internet, algo impensable hace tan sólo 20 años, y que nos ha llevado a vivir una revolución, como ya vivieron aquellos en su época con la llegada del ferrocarril o la llegada de la luz eléctrica en las ciudades. La diferencia con respecto a aquellos momentos es que hemos sido conscientes de cómo ha llegado esta revolución, ya que en sí misma nos ha ofrecido los medios para ello, lo que ha servido para vivir día a día los cambios que han ido aconteciendo.
El acceso a la información desde cualquier lugar del mundo, nos ha mostrado muchos más acontecimientos que han tenido lugar durante esta década, como las grandes tragedias o esos mismos avances tecnológicos.
Vivo con espectación la llegada del Ave a cada vez más lugares, empezar a disfrutar de viajar en avión, porque realmente sientes que vuelas, y puedes llegar a ver desde el cielo cómo son las tierras y los mares..., con los conocimientos que te aporta la bella geografía.
Pero para mí la década ha transcurrido firme y recta en ocasiones y con pequeñas ondulaciones en otras hacía el día de hoy, último día del año, dejando muchos buenos momentos, y muchos de estos vividos con la gente que más quiero: grandes y pequeños viajes, vueltas en tren y en búho a altas horas de la madrugada, sobremesas de tibias siestas en el sofá, desayunos cortos de risas y colegueo, días de estudio en la universidad, fiestas y actos en el local, marchas hacia la búsqueda de un mundo mejor, bienvenidas en un radio desde cientos a miles de kilómetros desde Madrid, paseos por salas rezumando cultura, días de cine, tardes de cine, noches de cine, momentos de bellos escalofríos y encuentro de recónditos rincones que han sido acercados con miradas buscadas, y besos y más besos...
Lago Djerid (Túnez). Noviembre de 2006
A mi familia a mis amigas y amigos, los pasados, presentes y futuros, os deseo Feliz 2011 y que sigamos compartiendo muchos momentos especiales en la próxima década.
4 comentarios:
Dice Bertolt Brecht que "a la buena gente se la conoce en que resulta mejor cuando se la conoce", y yo suscribo y te dedico esta frase, junto a mis mejores deseos para este 2011.
¡Feliz Año Nuevo, Gu! Que seas muy feliz y que yo lo vea, lindo! :)
Holaaa! simplemente quería desearte un feliz año y se me ocurre que mejor hacerlo con uno de los pensamientos de Mario Benedetti (que me encanta) y que acabo de recibir en un email de felicitación de año nuevo.
Espero que os guste:
No te rindas, por favor no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda, y se calle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños. Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque cada día es un comienzo nuevo, porque esta es la hora y el mejor momento. ¡feliz 2011!
Pues sí, Yeye, la década ha tenido de todo, como en las boticas. Algunas cosas deseamos que hubieran perdurado para siempre, acompañándonos hasta el final... Y creo que no te van a faltar muchos de esos buenos momentos a lo largo del año.
Un beso
(Yeye, el comentario anterior, el que sale suprimido, he sío yo, que no sé qué he hecho ;)
Publicar un comentario