"Mama quiero unos rotus de 36", anda que la niña se conforma con una caja de 12, mira, estoy de la Vuelta al cole, hasta el moño.
En el Carrefour, sólo te encuentras con el libro de música, y encima de la antigua edición, menos mal que encontramos el de inglés, pero sólo había uno de los dos, el de los ejercicios, al final el 25% de descuento que hacen me lo como con patatas, y más ahora que cuando voy a pagar me entero de que han quitado el descuento, y tuve que ir a comprarle los diez libros a la papelería del barrio, donde la Ana. Una hora esperando, la muchacha no daba a basto, claro a quién se le ocurre poner una librería en Parla Este, sólo hay esa, ya le dije yo, vas a tener que abrir sucursales hija..., la otra me miraba con cara de "te voy a echar a las leonas que tengo aquí".
En El Corte Inglés, to el mundo con el uniforme, yo no claro, siempre he ido a colegios públicos, y mi niña también.
Le fui a probar a mi Lucía una falda muy mona que encontré en oportunidades, y me salta la niña "mama, huele a Risquetos", qué Risquetos ni que leches, anda vamos pa fuera, que no vuelvo a comprarte nada. Luego en casa le pregunté que era eso, y me di cuenta de que me estoy haciendo mayor, ains, en mi época con los gusanitos de un duro y los chicles Cheim nos conformábamos, ahora, los hay hasta de kepchut y mostaza.
Siempre Yeye
2 comentarios:
ayyyy, y lo buenos que están, mi madre...lo mejor es ese saborcillo que permanece en tu lengua hasta la siguiente comida y los dedos anaranjados de perfume perpetuo hasta la siguiente ducha...jaja...vuelta al cole!!!
besitos mil na rebajaos
Qué bueno el post! Me recuerda cuando iba a la escuela española y que nos daban la lista de los libros. Los teníamos que comprar en España y me faltaba alguno.
Publicar un comentario