El adiós a Parla Este y la llegada a mi verde hogar marca un antes y un después en este año, un pasado de tristezas e impotencias y un futuro-presente de nuevas inquietudes, hasta el punto de que a penas tengo recuerdos de lo que ocurrió durante esos 4 primeros meses del año, si bien interrumpidos por un precioso viaje a Nueva York, o por los videos Sesame Street que me hieron pasar las tardes más amenas de lo que esperaba.
Otras tardes la radio supo encontrarme e hizo entrar en cavilaciones propias, reflexiones y viviencias de los chicos de Radio Nicosia, el Ortega, o los mails de Hora 25.
Pero tras esos días cabizbajos nuevas ilusiones fueron llegando y entre ellas una nueva casita donde la Yeye me recibió con los brazos abiertos, para poder seguir dándole vida a este espacio de vivencias.
Pero no sólo fue el viaje a Nueva York, también el Ámsterdam entre risa y risa taciturna y el de Gandía-Italia, donde por primera vez en mi vida me sentí afortunado de dormir junto a alguien
Volví a disfrutar de mi pasión por la Geografía, me enamoré de Vetusta Morla, lloré con Antes del Amanecer y recordé y recordé hasta el Antes del Atardecer, con la que descubrí a Nina Simone
Me ilusioné con la elección de Obama e incluso pensé en tirar unos cohetes el próximo 20 de enero.
Pero sobretodas las cosas quiero agradecer que el 2008 haya sido uno de los mejores a mis amigos y amigas, las viejas y los nuevos y a mi familia.
Y a ti, Gracias Yeye.
He elegido esta fotografía para mi 2008 porque simboliza muchas cosas, una escalera, una conferencia, un color, gente...